Καλησπέρα, χαιρετισμούς από Ελλάδα.
Si esto os suena como griego, tenéis toda la razón porque lo es. Es que hoy hemos pasado de Bulgaria a Grecia, el país número once en este viaje.A veces pasamos la frontera porque estamos hartos de un país (como era el caso en Suiza), pero Bulgaria nos ha gustado bastante. Han sido nueve días fantásticos, pero sí, estábamos hartos de la lluvia. Y madre mía, qué cantidad de agua ha caído hoy.
A ver... a pesar del concierto de las ranas habíamos dormido bastante bien. Mi papi tenía que hacer un par de cosas que le tenían ocupado durante una buena parte de la mañana. Y yo aproveché para dormir un poquito más. Luego salimos en coche y pronto pasamos por la pequeña ciudad de Smolyan. Allí mi papi hizo compras - en Lidl por supuesto. Y luego seguimos la ruta hacia la frontera con Grecia. Hicimos una pequeña parada para ver un monumento a la guerra. No sé cual, aquí hubo muchas. Y en este mismo momento comenzó a llover... y mucho. Los limpiaparabrisas apenas eran capaces de quitar el agua, y en la carretera había muchos charcos muy profundos. Cuando pasamos un poco ligero por estos charcos, el coche levanto muchísima agua. Jiiihaaa.
En fin... casi llegamos a la frontera con Grecia. Casi... porque a menos de un kilómetro antes de llagar al puesto fronterizo la carretera estaba cortada. Podrían habernos avisado un poco antes, porque ahora tuvimos que volver unos 15 kilómetros y coger otra carretera hacia otro sitio donde podríamos cruzar a Grecia.
Primero comimos en la cámper, al lado de la carretera, y luego fuimos una hora y media hasta llegar a la frontera. No tuvimos ningún problema para pasar. Ni siquiera querían ver mi pasaporte, solo el de mi papi y el del coche.
Efectivamente en Grecia hace mucho mejor tiempo que en Bulgaria. Curioso eh? La temperatura es muy agradable y no llueve. Esto nos viene muy bien porque mi papi quiere secar la ropa de cama. Al conducir con tantísima lluvia ha entrado un poco de agua en la cámper y la cama se ha mojado un poco. Menos mal que yo tengo mi propia canasta.
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