Después de 4 días y 4 noches en Tiflis hemos retomado nuestra vida nómada.
Ya al final de la mañana nos despedimos de nuestros compañeros camperistas y cogimos el coche. Pero todavía no salimos de Tiflis, porque mi papi tenía que hacer una tarea importante: la colada. Hay un Speed Queen a unos 20 minutos en coche, donde yo no estaba nada bienvenido y teníamos que esperar en la calle hasta que las máquinas terminaron su trabajo. Casi dos horas más tarde toda la ropa estaba limpia, seca y doblada y pudimos seguir nuestra ruta.
Salimos de la ciudad y fuimos por la carretera s3 (en georgiano se escribe ს3, más o menos), también llamada la autovía militar. Esta carretera sigue al norte hasta cruzar la frontera con Rusia. De hecho es una de las pocas carreteras que comunican Georgia con Rusia, por lo cual había muchísimo trafico, sobre todo de camiones rusos. Además hay un montón de trabajos de reparación de la carretera, entonces es un atasco continuo.
Hicimos unas paradas para ver cosas al lado de la carretera: un monumento soviético cerca de Dusheti y el monumento de 300 Aragvians cerca de Aranisi. Sobre todo este último es súper grande y un tanto espantoso.
Para encontrar un sitio para dormir tuvimos que salir de la carretera principal. Encontramos un lugar bastante agradable entre las montañas, con césped, un merendero, un arroyo etcétera. No necesitamos más.