Hoy también hemos hecho media jornada, porque después de la comida ya no nos hemos ido a ningún sitio.
Por la mañana fuimos en coche al conjunto del monasterio de Haghartsin, que estaba a solo 20 minutos desde el sitio donde habíamos dormido. No se parece precisamente a un monasterio sino a un conjunto de unos 6 u 8 pequeñas iglesias o capillas. Está todo bastante restaurado pero estas iglesias ortodoxas no destacan por abundancia de decoración - son más bien oscuras y austeras. No tardamos mucho más que media hora para verlo todo y la verdad es que no nos impresionó demasiado. ¿Será que estamos ya un poco saturados de tantos monasterios? Vamos, el monumento soviético que está cerca del monasterio casi me gustó más.
Después de ver el monasterio cogimos el coche hacia el sur. Pasamos por otro pequeño monumento soviético (pequeño quiere decir unos 15 metros de alto) y luego no tardamos nada en llegar al sitio donde comimos y donde también vamos a dormir. Estamos en la orilla del lago Sevan, un sitio recomendado por Ingo, nuestro amigo alemán que conocimos en el norte de Georgia. La verdad es que es un lugar estupendo, con una playita de arena blanca, pero de momento no me sirve porque ya comenzó a llover y parece que va a haber tormenta eléctrica. ¡Chacáaaa!