Después de meses de pasar frío, por fin hace buen tiempo y puedo echarme un rato al sol, en la terraza.
Dormimos en la casa nueva y hay unos perros ladrando en la calle. ¡Qué miedo estoy pasando! Aquí debajo de la cama de mis papis me siento más seguro.
No tengo huevos pero tampoco tengo pluma. ¡Ellos sí!
Buuuuhuuuu, esto es lo peor que me ha surgido en la vida. Qué brutos son mis papis. Me han llevado a la veterinaria y ella me ha quitado mis huevecitos. Nunca quiero volver a este sitio.
Hace unas semanas mi madre tuvo otra camada de cachorritos. Son dos niñas y dos niños. El padre no es el mío, entonces son mis hermanastros.
Soy un perro muy inteligente entonces les pedí un puzzle a los Reyes. Pero en vez de un puzzle me regalaron un osito de peluche. Que cosa infantil, ¡hua!
Mis papis me han traído este regalo de Botsuana, es un tipo de puerco de espín. Es muy divertido pero como veis ya he comenzado a destrozarlo; falta su nariz que era más fácil de quitar.
Esta mañana estoy un poco nervioso porque mis papis vuelven de su viaje por África.
Como es costumbre en España, se entra en el año nuevo llevando calzoncillos rojos. Entonces mi tita María me ha puesto estos. Jejeje je.
... pero estoy un poco triste porque mis papis están muy lejos, están de viaje en África.
Pero mientras ellos están viajando por África me quedo con mi tita María y tito Juanjo, juhuuuuu. Es que a mi no me gustan los felinos entonces no voy de safari.
Mi papi Edu está muy liado con la reforma de nuestra casa nueva. A veces voy con el para ayudarle pero no siempre me apetece trabajar. Entonces no puedo hacer otra cosa. ¡Qué aburrimiento!