Qué mal comienzo de un día que por lo demás ha sido maravilloso. Cuando entré en el dormitorio delantero del barco para despertar a mis titos, noté que mi tito Antonio ya no estaba. Temía que se había
Qué mal comienzo de un día que por lo demás ha sido maravilloso. Cuando entré en el dormitorio delantero del barco para despertar a mis titos, noté que mi tito Antonio ya no estaba. Temía que se había
Esta mañana pensaba que mis titos y mis primos se iban a mudar de casa, porque estaban cargando muchísimas cosas en su coche. De hecho era tanto que también metieron cosas en nuestra cámper. Pero