Hoy todavía estamos en Utrera, en el camping Finca Ángela. Salimos bastante temprano (incluso sin desayunar) y fuimos andando, casi una hora por el campo, hasta el centro de Utrera y allí nos encontramos con mi tito Pedro. Mi papi desayunó con él y también compraron unos pasteles que se llama lengua de cordero. Esto suena como si un perrito como yo también puede comerlo, pero no me dieron nada de nada.
De vuelta en el camping mi papi se lo pasó muy bien con los otros camperistas. Todo el mundo quería ver nuestra cámper que por supuesto es la que más mola.
Por la noche hubo otra cena preparada por James, era comida indonesia, se llama rijsttafel (mesa de arroz) y además del arroz había más de 10 diferentes cosas... pero nada para mí. Menos mal que también había llegado una nueva familia con dos niños y podía jugar un poco con ellos.
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